El Aliento y la Luz
"Ecos que respiran. Memoria y renacimiento tras la peste del siglo XXI"
Un proyecto de José Rocha
Dos elementos esenciales. El aliento recuperado, y la luz como metáfora del renacimiento.
El Aliento y la Luz
Ecos que respiran. Máscaras, memoria y renacimiento tras la peste del siglo XXI
Las pandemias no terminan de un día para otro. Sus resonancias —sus ecos— permanecen en los cuerpos, en la memoria, en los gestos. Ecos de la Pandemia, el germen de esta exposición, fue el primer intento por nombrar esas reverberaciones internas: el encierro, la ansiedad, el miedo y también la capacidad de imaginar desde el silencio.
Hoy, esos ecos se transforman. Han dejado de ser susurros de lo perdido para convertirse en afirmaciones de lo vivo. La exposición El Aliento y la Luz nace de esta transformación: del eco al aliento, del gris a la claridad, de la máscara como barrera a la máscara como puente.
Las obras aquí reunidas —máscaras inspiradas en la del médico de la peste negra, intervenidas por artistas contemporáneos, fotografías que las habitan, los videos que nos cuentan historias, la literatura y el performance que nos hacen reflexionar y el dibujo que plasma los instantes — no son reliquias del encierro, sino expresiones rituales del renacimiento. En cada pieza, el arte captura el momento en que volvimos a respirar, a vernos, a tocarnos con los ojos.
El aliento —privado, protegido, silenciado— se convierte aquí en metáfora de la vida que se impone, de la respiración profunda después del peligro. Como símbolo de presencia vital, de continuidad
La luz, que entra por rendijas, por ventanas, por ojos abiertos, representa el renacimiento, la creatividad, el acto de volver a mirar al otro con esperanza. Como signo de conciencia, de alegría y de revelación.
El Aliento y la Luz es una celebración íntima de lo humano. Una colección de rostros ocultos que se resignifican como testigos de un rito de paso: del miedo a la expresión, del encierro a la presencia, de la peste a la posibilidad.
Lo que fue Ecos de la Pandemia hoy respira como El Aliento y la Luz. Una narrativa expandida, optimista, que honra lo vivido pero celebra lo que emerge: la belleza de lo frágil, lo humano, lo que sigue.
El proyecto el aliento y la luz del artista José Rocha es una pulsión creadora de colectividad. El artista proveniente de la imagen y la visualidad, hace un giro en sus procesos, que lo retornan como a los antiguos, al necesario oficio, a la tecné como vehículo de conocimiento.
Ahora también alquimista peletero confecciona máscaras no para disfrazar sino para develar identidad, una identidad otra y situarnos frente al espejo en un ejercicio de expiación o quizás de absolución. Una obra colectiva, donde el individuo se observa desde afuera a sí mismo, y al mismo tiempo observa lo otro.
¿Cómo nace El Aliento y la Luz?
En abril 2020, durante el confinamiento por la pandemia del COVID-19, nos vimos en la necesidad de reinventar nuestras vidas, adaptarnos al cambiante mundo de lo desconocido, vivir momentos de incertidumbre. Es durante este confinamiento, en el que nace la idea de crear máscaras inspiradas en uno de los tiempos más difíciles para la humanidad, tiempo en que se dice desapareció un 50% de la población humana de Asia, Europa y Norte de África, me refiero a la Peste Bubónica o Peste Negra. En mi gusto por la música y del siglo XVII, comienzo mi exploración sobre pandemias en la historia de la humanidad y redescubro de manera más cercana e íntima la máscara del doctor de la peste negra. La fascinación por este artículo y el personaje en sí, me llevan a descubrir el arte de la marroquinería, y comienzo a explorarlo poco a poco, encontrando en él un gozo especial, durante todo el proceso de creación desde la impresión del patrón, hasta tenerlas terminadas en mis manos.
Al día siguiente de haber publicado la creación de mi primera pieza, la maestra Marisol D’Estrabeau - me escribe un texto sobre recuerdos de su infancia que la máscara le ha traído y me pregunta si me importaría que interviniera una de ellas, la respuesta es obvia, y de allí en adelante todo es historia.
Hoy El Aliento y la Luz, está conformada por una colección de más de 30 máscaras, intervenidas por 48 artistas, 40 fotografías de reconocidos fotógrafos de nuestro estado, 4 obras gran formato del maestro Carlos Generoso, un vídeo del maestro Juan Carlos Bonilla y un performance de la Compañía _____ con texto de la maestra Yajaira Sánchez.
En su inicio nombrada Éets’o’ob, ecos en lengua maya, hace referente al efecto de resonancia que ha tenido la pandemia en nuestras vidas, de una u otra manera, todos hemos sido tocados por ella, física o emocionalmente, negativa o positivamente. Abordamos “ecos” desde el punto de vista de la creación de las máscaras, las cuales vibraron como un eco en cada artista que participa en el proyecto, como podrán observar de manera diferente en cada una de las obras.
El eco es un tipo de onda que, debido a su naturaleza, tiene la capacidad de reflejarse ante los obstáculos. El eco es un fenómeno acústico que se produce cuando a una persona le llega tanto el sonido emitido como la onda reflejada, con un desfase de tiempo que permite detectar las dos ondas como dos sonidos distintos.